La historia vuelve y se repite. Hace unos meses en las instalaciones del Alto del Río en Calarcá un soldado accionó su arma y disparó contra un compañero causándole la muerte, en otros casos similares unidades de la Octava Brigada adscritas al Eje Cafetero han terminado también con la vida de compañeros en casos que son reseñados por las autoridades como accidental.
Sala de redacción
Esta semana, un grupo de soldados pertenecientes al batallón de alta montaña General Urbano Castellanos Castillo destacado en una zona de Pijao, cumplía con sus labores de patrullaje y vigilancia en la zona, en un momento dado y cuando los uniformados al parecer adelantaban aseo a sus armas, uno de ellos, en un supuesto descuido, accionó el gatillo y por accidente impacto contra tres de sus compañeros, en el acto perdió la vida Eider de Jesús Jaramillo Pérez, de 19 años de edad, oriundo del departamento de Risaralda mientras otros dos resultaron afectados con lesiones de consideración, se trata de John Freddy Torres Zapata y Jorge Steven Ospina Osorio quienes se recuperan en distintos centros de salud de la capital quindiana.
Hubo pánico
Una vez se presentó el lamentable episodio, los investigadores asumieron sus respectivas labores para establecer los motivos que terminaron con la vida del soldado y heridas a dos más.
La emergencia ocurre en una de las zonas montañosas más vigiladas del departamento donde años anteriores fue centro de actividades subversivas. Las detonaciones sorprendieron a los moradores de la zona, que en un comienzo se sintieron sorprendidos y preocupados por lo ocurrido.
Desde el comando de la Octava Brigada se dijo que las investigaciones darán los resultados claros y precisos sobre las verdaderas causas de este fatal desenlace que enluta una familia del vecino departamento y a su vez a las fuerzas acantonadas en el Quindío.
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