Hernán Torres es uno de los técnicos más triunfadores en el fútbol colombiano. El tolimense condujo al Independiente Medellín en el último año y en la actualidad con 32 puntos espera clasificar a su equipo a los cuadrangulares a dos fechas de terminar el torneo. Sin embargo los directivos del plantel anunciaron después del juego donde su equipo igualo a dos goles que su salida era inminente. Torres se despidió de los jugadores y se marchó del club a petición de los accionistas principalmente de Eduardo Silva Meluk quien posee las mayorías. La sorpresa se sitio entre el plantel de jugadores y un sector de la hinchada que lo sigue pidiendo.
Los últimos cuatro resultados que no fueron positivos gastaron la relación entre el entrenador nacional, algunos directivos, parte de la prensa y la hinchada que exigía su salida. El equipo prácticamente asegurado entre los finalistas, pierde injustamente su timonel por una decisión caprichosa del principal accionista quien le dijo a los medios de comunicación que él tiene un equipo para que le den gusto y su Medellín no lo estaba haciendo. Lo de Silva Meluk suena mal muy mal.
El propio Eduardo Silva Meluk, presidente del Deportivo Independiente Medellín, confirmó y argumentó a los medios, la decisión que tomaron los dueños del equipo y la junta directiva, de no contar más con los servicios del cuerpo técnico encabezado por Hernán Torres, su asistente técnico Darío ‘Chusco’ Sierra y su preparador físico, Alejandro Guzmán. Esto dijo Silva Meluk:
“Los argumentos son: el sistema de juego, lo que está mostrando el equipo. Queremos tener otra visión de equipo, cambiar el esquema de juego y eso es, yo creo, que un argumento totalmente válido. Cuando uno es dueño y tiene un equipo, sueña con algo y sino están cumpliendo con sus sueños y deseos, toman decisiones y buscan alternativas”, explicó Silva Meluk.
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