Por: Andrés F. Zapata

Como siempre la incultura y falta de amor por la ciudad

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Sinceramente se siente impotencia, rabia, y desilusión al ver detalles como este, que pueden no ser muy graves, pero que son el reflejo de la falta de amor y sentido de pertenencia para con nuestra ciudad y cada uno de los espacios urbanos que se otorgan a la ciudadanía, únicamente con la intención de embellecer el entorno y darle una cara de autenticidad, estética y progreso.

Triste que no sepamos cuidar nuestra ciudad y que la ignorancia e incultura salte a la vista y sea el común de muchos “inadaptados”.

Apenas están concluyendo las remodelaciones que se le están haciendo al importante parque de Los Fundadores en la capital quindiana y ya sus paredes lucen estropeadas y rayadas con aerosol, en donde como siempre, solo se expresan tonterías que a nadie le interesa y que solo provocan la indignación y rechazo de las personas en general, que no se explican cómo situaciones como estas se siguen presentando.

Para muchos, la remodelación de dicho parque, incluidas las lindas pinturas representativas y típicas de estas tierras cafeteras significaban un nuevo y necesario aire para la infraestructura de este sector de la ciudad que trata, desde la Administración Municipal, de esmerarse para que siga siendo uno de los mejores espacios para el esparcimiento familiar, social y cultural, viendo con cara de positivismo los arreglos que aún se adelantan y que están próximos a concluir.

A nivel general todo parecía muy normal, hasta que la estupidez y vandalismo se hizo presente como cosa rara. No duró una semana intacta la pared que fue rayada, ya que días antes había sido pintada en su totalidad para que combinara con el resto de pinturas de lindos paisajes cafeteros alrededor de la plazoleta allí ubicada.

Soy 100% defensor de las expresiones artísticas y de usar espacios “muertos” para darles vida con una buena obra de arte, pero rayar con un aerosol cualquier idiotez que venga a la mente, eso ya incluso es delincuencia y debe ser castigada por las autoridades, quienes en casos como estos deben identificar y responsabilizar a quienes cometan hechos como este.

Aprendamos a ser más cultos y menos gamines, a cuidar nuestro entorno, a sentirnos orgullosos de las muchas o pocas obras, emblemas o construcciones que se ejecuten en nuestra ciudad. De ahí radica la cultura, el respeto incluso hacía los demás y hacia nuestra ciudad.

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Ignorancia y Necesidad

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Hasta escalofriante la imagen que nos envía un lector de nuestro periódico, en donde claramente se ve un hombre que se moviliza en bicicleta, pero que a la vez lleva en sus hombros a un bebe de no más de dos años, arriesgándose a que ocurra un grave y mortal accidente, todo por la imprudencia, ignorancia y la necesidad, que combinada llega a cometer este tipo de locuras.

En Armenia, tristemente es común ver casos como estos, ya sea en bicicletas o en motos los familiares están acostumbrados a transportar a sus hijos sin ninguna protección, todo porque no cuentan con los recursos necesarios para llevarlos en otro medio de transporte más seguro. El tema de la falta de recursos es entendible, pero ante ningún caso se puede permitir que esto suceda, ya que los principales afectados siempre van a ser los niños. Para fortuna del niño de la imagen unos buenos ciudadanos se acercaron al señor y al parecer le ayudaron llevando al niño en su carro hasta su sitio de destino.

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Basuras al por mayor

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Nuevamente la suciedad en Armenia se sigue haciendo presente y cada vez incluso con mayor fuerza.

Múltiples esquinas del centro de Armenia lucen abandonadas por el impresionante cúmulo de desechos de todo tipo, del cual las autoridades poco hacen para controlar las excesivas pilas, pero de la que las personas de la calle utilizan para incrementarla y esparcirla por más lugares, perjudicando a la ciudad en general.

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Por EL EJE