César Augusto Patiño, acusado, señalado, tratado como presunto culpable y estafador en bien inmueble
Por: Alex Morales
Luego de un proceso de 12 años en el que se le acusó por estafa y falsedad en documentación, César Augusto Patiño Gómez, con la frente en alto se confiesa a Eje Noticias, dijo que la vida sigue, que lo que le tocó vivir no es más que una de sus experiencias, que está tranquilo, que las vainas aunque jodidas, le enseñaron, que en medio de tanta mierda algo aprendió, que todo por estos días, anda mejor.
En Eje Noticias les contamos el caso del exsecretario de Gobierno de Armenia Cesar Augusto Patiño, uno de los muchos tantos procesos judiciales en este país, donde la justicia y los medios de comunicación acusaron de (presunto culpable, de dilincuente).
Quien es Patiño Gómez
Llegó a ser conocido en la sociedad quindiana en los años 80 y 90, por su trabajo y ejercicio en el sector público por ejemplo: fue gerente de Camacol Armenia en 1980, Concejal de la misma ciudad en 1986, secretario de Gobierno departamental entre 1986 y 1989, gobernador encargado del Quindío en 1987, gerente del Fondo Municipal de Vivienda entre 1995 y 1997. Secretario de Gobierno municipal de 1992 a 1995, alcalde encargado de Armenia varias veces entre 1992 y 1997.
Como de película
La película del señor César Augusto Patiño Gómez arquitecto de profesión y con cedula de 7521068 empieza como todas las historias por un inicio, un nudo y un desenlace, aquí les explicamos el caso.
Eje Noticias conoció que entre 2002 y 2004 y en calidad de arquitecto, Patiño Gómez, compró un predio de 205 mil metros cuadrados aproximadamente al señor Alexander Ayala Serna ( el vendedor) de un terreno denominado “ La Maravilla” del que solo poseía el vendedor un poder de venta y quien a su vez trasfiere a César Augusto Patiño Gómez ( el presunto acusado) con una promesa de venta, a su vez el vendedor le compró a la señora Luz Aida Botero Guinde y firmó con poder la escritura en la notaria tercera el doctor Alberto Gómez Jaramillo.
Véase documento de venta.
El desenlace
Patiño en su rol de constructor de viviendas de interés social como en el caso del barrio La Patria a través de su empresa Inversiones Los Faroles, compró el predio con el fin de realizar la construcción de 1.256 casas unifamiliares de interés social, le hizo una promesa de venta, sacó una licencia de construcción como responsable de la obra, pagó costas ante la curaduría e inició obras de movimiento de tierra, en este desarrollo Planeación Municipal solicitó la licencia de construcción estipulada en la curaduría urbana número 2, elaboró un plan parcial y lo presentó en su momento a consideración del municipio para incorporar el lote en zona de expansión[E-P1] urbana.
“Después todo se volvió un lio jurídico que duro diez años” dijo Patiño Gómez a Eje Noticias.
La falsificación de las firmas como se da ¿Por qué lo acusaron en su momento de estafa los medios de comunicación?
“En la escritura falsa aparece el señor Alexander Ayala (el vendedor) a quien le falsificaron la firma en un documento notariado y donde compra el lote el señor César Augusto Marín Cardona (el supuesto estafador) el mismo lote que legalmente adquirí en Armenia y esto quedó registrado es decir la falsificación en un auto de la notaria 33 de Bogotá”.
A esto dijo lo siguiente:
“Cuando inician los líos legales me doy cuenta tarde que aparece como propietario César Augusto Marín Cardona (el supuesto estafador) a quien luego el proceso judicial demostraría que es el conductor de una volqueta en el Cerrejón. El determinador se llama Jairo Murcia Alemán (el otro supuesto estafador) quien aparece como el determinador de la falsificación y puso otro a firmar, este último está en la Picota, el otro prófugo y condenado a ocho años Alemán estaba pidiendo prisión domiciliaria, por su parte el conductor de la volqueta no aparece, en síntesis diez años después es donde se demuestra la falsedad”.
Continúa
“Que dice el juzgado, túmbese la anotación y vuélvase a su estado natural donde aparece como dueño César Augusto Marín Cardona (presunto culpable) y me reconocen como el poseedor, resulta que esta gente apenas ve que no tiene los elementos jurídicos para quedarse con el lote metieron un proceso por posesión hace tres o cuatro meses, dicen que desde el 2008 están en el terreno y está en proceso demostrar que la posesión por el juzgado la tengo yo, el viernes pasado comisionó el juzgado la entrega del terreno a mí nombre como propietario”.
Cómo se enreda el lote y lo acusan de estafa
“Este lote ubicado al final de La Patria, colinda con el terminal de buses de este barrio y va hasta el predio de parques de Bolívar en las Colinas es decir 205 .480 metros cuadrados en total”.
“Se hizo la investigación por parte del CTI y cuando iba a pasar el proceso a juzgamiento, el juez manifestó que el delito había sido producido en la ciudad de Bogotá y que allí debería pasarse el proceso, le cuento que en este tiempo hubo cambio de tres fiscales en el proceso y después de años el juzgado determinó tumbar la anotación anómala y descubrió que si se falsificaron las firmas y que soy inocente”.
Dice además que:
“El juzgado tomó la entrega del lote y solicitó que se me devuelva”
El desenlace
¿Si es inocente para qué viene a los medios qué busca?
“Fui una persona pública, encargado de la gobernación por decreto presidencial, secretario de gobierno, es mi buen nombre que es además mi mayor patrimonio. Quiero hacer claridad que no me he robado ningún lote, ni he estafado a nadie, ni he falsificado firmas, si bien tuve un problema personal en ningún momento es de robo o estafa”.
Eje Noticias también conoció que constructora Los Faroles de su propiedad, fue la firma encargada de promocionar un proyecto de vivienda denominado “La Maravillla” y que de acuerdo con las investigaciones hubo irregularidades en la adquisición del mencionado lote, entre estas se cuenta la falsedad en documento a la que fue sujeto por parte de los involucrados César Augusto Marín Cardona y Jairo Murcia Alemán, ambos hoy condenados por este caso por parte de del Juzgado Tercero con función de conocimiento de Bogotá y firmado por el juez Oscar José Castillo Alarcón.
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