“En el SENA se pueden hacer realidad los sueños, porque la Entidad ofrece a sus aprendices elementos para convertirse en grandes técnicos y tecnólogos”: director general Alfonso Prada.
El SENA es la primera entidad gubernamental en América Latina que logra materializar el programa ‘La fuerza de los 100 mil’, promovido por el presidente Barack Obama.
Sebastián Rodríguez Monrroy es un joven de 21 años de edad, tecnólogo en gestión de establecimiento, alimentos y bebidas, y – como sus siete compañeros del Centro de Comercio y Turismo del SENA regional Quindío-, recibió la visa que le permitió viajar a Estados Unidos para conocer nuevos procesos educativos en áreas como cocina molecular, destilación de cerveza, gastronomía en general y turismo ecológico, de parte de alumnos y profesores del Miami Dade College.
Luego de que el director general del SENA, Alfonso Prada, le entregara la visa, el joven aprendiz no pudo contener sus lágrimas, mientras relataba a sus compañeros y asistentes al acto de despedida simbólica, las oportunidades que ha tenido gracias a la Institución.
“Cuento mi historia para enviarles un mensaje a todos. El SENA me ha dado muchos regalos y hoy recibo uno nuevo para aprender nuevas cosas”, precisó el joven.
Sebastián y sus compañeros están en el norte del continente como resultado de unas becas obtenidas por ellos, en el marco de la iniciativa del presidente Barack Obama ‘La fuerza de los 100 mil’, a través de la cual se hacen intercambios estudiantiles a lo largo y ancho de América para fortalecer los conocimientos de los jóvenes beneficiarios.
En el acto de despedida de los ocho aprendices estuvieron presentes el ministro consejero y embajador encargado de Estados Unidos, Fhilip Laidlaw, y la consejera de educación, cultura y prensa de la Embajada, Susan Bell.
Bell destacó la gestión del SENA para abrir puertas en Washington con el fin de materializar el sueño que convirtió a la Institución en la primera gubernamental latinoamericana que logró hacer parte de ‘La Fuerza de los 100 mil’.
“Se trata de uno de los programas educativos más valorados. El presidente Obama dice que cuando nos conocemos juntos y aprendemos juntos, vamos a crecer juntos; y yo me siento orgulloso de hacer parte de este sueño”, afirmó Alfonso Prada.
Los jóvenes profundizan en investigación, innovación y bilingüismo. “A partir de aquí hemos hecho contactos para que empecemos a construir algunos lazos que nos permitan tener aprendices en doble vía que fortalezcan su formación, no solo en turismo y gastronomía sino también en otras áreas”, aseguró Carlos Fabio Álvarez Ángel, Director (e) Regional Quindío.
“El viaje de estos aprendices a Miami demuestra que en el SENA sí se pueden hacer realidad los sueños, porque la Entidad les ofrece los mejores elementos para convertirse en grandes técnicos y tecnólogos”, puntualizó Prada.
Hace unas semanas –como parte del intercambio– una delegación del Miami Dade College visitó el Centro de Comercio y Turismo de la Regional Quindío. Los jóvenes estadounidenses estuvieron inmersos en una completa formación en turismo y gastronomía típicos del Eje Cafetero.
Ellos aprendieron sobre los diversos estilos de alojamiento con que cuenta la región e identificaron la tipología de hoteles que existen; además conocieron cómo la palma de cera –el árbol nacional–, el café y las costumbres de esta zona del país han sido fundamentales para convertir a Caldas, Risaralda y Quindío en destinos turísticos predilectos, tanto para propios como para extranjeros.
Con la visita de los alumnos de Miami se dio un primer escenario para la planeación de un proyecto de emprendimiento, gerenciado conjuntamente por los estudiantes del ‘community college’ y los aprendices del SENA.
“Una vez culminemos nuestra visita técnica, esperamos consolidar la iniciativa”, señaló Ignacio Quintero, instructor de la entidad en que más confían los colombianos que acompaña al grupo de jóvenes nacionales.
“Todo lo que aprendamos nos servirá para fortalecer nuestras competencias, porque cuando tienes un componente de internacionalización en tu formación la proyección laboral es más amplia”, precisó Johanna Marcela Soto Gómez, otra de las aprendices que hace parte de la delegación viajera.
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