Días previos a su nominación, la fiscal Luz Adriana Camargo no le causaba interés posar ante la prensa del país. Fue la que menos aparecía como favorita ante las cábalas de los vaticinadores del nombramiento de tan alta dignidad, y fue por que como lo ha demostrado hasta el momento, no estar interesada en mojar prensa, madrugar ante los requerimientos de la prensa con el fin de pronunciarse sobre investigaciones de la entidad perseguidora de delincuentes, o tal vez producir impacto mediático para acrecer su imagen. Y es que lo hace inteligentemente.
Se ha concentrado es en darle a la fiscalía, lo que prometió cuando expuso su programa ante los magistrados de la CSJ; trabajo, equilibrio, imparcialidad y resultados. Distraerse atendiendo todo el tiempo los medios, es alejarse de las responsabilidades propias del cargo.
Entiende que lo suyo, es vocación, servicio, ética y manejo serio de los asuntos que concita la atención ciudadana. Y no es para menos, al cabo de unos meses ha demostrado como es el papel que desempeña en una institución bandera de la democracia en la persecución del delito. Ha sabido acoger la prudencia, el respeto, la independencia, y la sindéresis después de recibir una fiscalía alterada por la politiquería, la enemistad y pelea cazada con el ejecutivo de turno y por sobre todo permeada por la soberbia y megalomania del titular anterior, de ingrata recordación. Fue el fondo de la tinaja, tocada con el ardoroso veneno de la infamia, precipitada por su antecesor Néstor Humberto Martinez. Hace poco, un periodista la indagó, si la razón de modificar la competencia del fiscal Burgos, con los casos delictuales del hijo del presidente, Nicolás Petro obedecía a situaciones jurídicas diferentes, a lo que la fiscal respondió:… Es a diferentes situaciones jurídicas que afronta el fiscal Burgos, por la decisión tomada por la comisión nacional de disciplina judicial de sancionarlo (por la filtración reservada de información a la revista semana). Respuestas inteligentes que solo dan, quienes manejan la sensatez y sabiduría. Las pocas salidas que ha tenido la fiscal Camargo en ruedas de prensa, es para dar a conocer asuntos importantes y de relievancia nacional, que lo hace con criterio, objetividad y y responsablemente, otros asuntos, no menos importantes, lo hace a través de boletines periódicos. El presidente Petro no se equivocó; hecho que no fue reconocido por sus implacables enemigos, quienes solo ven sus malogrados defectos comportamentales y no sus inmensas cualidades en la conducción del estado.
La inmensa preocupación de la fiscal Camargo, es la ampliación del cuerpo de fiscales, en virtud al represamiento de las acciones judiciales, por la falta cada vez más de personal, que descongestione un sistema, cuyos procesos llegan tan rápido como la velocidad de un Ferrari, pero las soluciones con la carga lenta de un Willis veredal. Nota final: No creo que el presidente Petro sufra de misoginia, por las desafortunadas declaraciones en contra de unas periodistas implacables críticas y enemigas de su gobierno. Ningun estadista ha exaltado la importancia de la mujer en la sociedad y el estado. Que lo digan las mujeres policías, las incorporadas al ejército, las madres cabeza de familia, las mujeres indígenas, campesinas, afros, profesionales, empresarios, emprendedoras, diversas etc. Los que aún no se han enterado, porque no les interesa, averiguen las fuentes de planeación nacional y prosperidad social de la presidencia de la república.
Hace poco le pregunté a una dama amiga, cuál era la razón por la que odiaba al presidente , y me contestó: Por su pasado guerrillero, y porque mira muy feo… Esa es nuestra cultura política, el maniqueismo político y la intolerancia, gérmenes de la polarización.
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