Por: Andres Felipe Zapata
A lo largo y ancho de nuestra ciudad son numerosos los senderos existentes en diferentes sectores. Unos más cuidados y custodiados que otros, en donde se les ve la mano de la comunidad por preservarlos y darles el trabajo que les corresponde, brindar un espacio natural para que familias enteras puedan compartir, caminar y respirar un mejor aire rodeados igualmente de la peculiar y hermosa flora y fauna quindiana. Este es el propósito de todo sendero, cuando fueron acondicionados para nosotros lo único en que se pensó fue en esto, pero lamentablemente la indiferencia de las autoridades y la proliferación de delincuentes han hecho de muchos de estos, el fortín ideal para maleantes de todo tipo.
Los hechos hablan por sí solos
Con conocimiento sobre el tema podemos asegurar que son constantes los hechos donde niños, jóvenes o adultos son interceptados por malhechores que repentinamente aparecen entre los arbustos con puñal o arma de fuego en mano para amedrentar y hurtar de pertenencias a sus víctimas. Despojándolos tanto de sus cosas materiales, como de su tranquilidad y confianza, ya que en ocasiones los afectados quedan con secuelas difíciles de superar.
No más la semana anterior, en el sector de la bomba de gasolina que queda más arriba del colegio INEM por toda la cra 19 un joven fue atracado por dos escorias que salieron de lo que es la entrada al sendero que comunica barrios como Proviteq y Mercedes del Norte, sorprendiendo al incauto joven que aparte de terminar perdiendo sus pertenencias fue apuñaleado en su muslo izquierdo con tal de evitar que saliera corriendo detrás de estos atracadores, quienes se inmiscuyeron nuevamente en el sendero para ya perderse por completo de la vista.
Casos como este pasan a diario en la ciudad, la idea no es acabar con estos lugares, los cuales tienen positivas intenciones, la idea como tal es poner mayor control por parte de las autoridades para neutralizar así el libre accionar de tanto delincuente suelto.
Pilas pues señores policías!
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