Finalmente Deportes Quindío logró el paso a las finales del torneo de ascenso, luego de una campaña inmersa en la irregularidad donde fueron más los picos bajos que altos.
Por: Cristian Marín Zuluaga
Sin desmeritar lo hecho por el ‘milagroso’ era inconcebible que el elenco de Armenia no lograra la clasificación, sin embargo, hasta la última jornada debió esperar para confirmar su asistencia a los cuadrangulares finales.
El partido ante Leones fue flojo. Los foráneos que llegaron al Centenario no fueron a regalar absolutamente nada y de allí la obtención de un punto para ellos que los dejó incrustados en un grupo relativamente asequible.
Quindío en medio de sus lagunas salvó un punto y se metió en el baile final, pero dejó una sensación de preocupación por el desequilibrado fútbol que ha venido exhibiendo en sus últimas presentaciones.
Ya el sorteo remata la esperanza de ascenso. Quindío quedó afincado en el grupo B acompañado nada más y nada menos que del América, Real Cartagena y su hermanito Universitario de Popayán.
De entrada se genera la suspicacia y las conjeturas ya conocidas en otras oportunidades. América es de Cali y el cuadro del Cauca es del propietario del Quindío, de allí surge el gran interrogante ¿A cuál equipo Hernando Ángel va acompañar en este último envión?
Quindío debuta ante América en el Centenario, un partido complicado donde los escarlatas seguramente van a sentir el respaldo de su gente que se movilizará a la ciudad.
El examen final para ‘cheché’ y sus dirigidos comienza ante el coloso de la categoría. Pensar en el ascenso es un factor poco probable por dos razones: el escaso fútbol del plantel y las intenciones mercenarias del propietario del club.
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