Sura sería la primera EPS privada en dejar de ser EPS y convertirse en gestora de vida y salud, según el director de la Adres. Esto se debe a que el Gobierno de Petro ha propuesto una reforma a la salud que busca transformar el sistema actual de aseguramiento por uno de salud preventiva, que ha generado un intenso debate en el país.
El Gobierno de Gustavo Petro ha propuesto una reforma a la salud que busca cambiar el modelo actual de aseguramiento por uno de salud preventiva, en el que las entidades promotoras de salud (EPS) se transformarían en gestoras de vida y salud, y dejarían de asumir el riesgo financiero de la atención de los usuarios.
Aunque el proyecto de reforma aún no ha sido aprobado por el Congreso, ya hay EPS privadas que han mostrado su interés en migrar al nuevo modelo. Según reveló Blu Radio, la primera en hacerlo sería Sura, una de las EPS más grandes del país.
Así lo confirmó el director de la Administradora de los Recursos del Sistema General de Seguridad Social en Salud (Adres), Félix León Martínez, quien dijo que Sura ya ha tenido acercamientos con el Ministerio de Salud para realizar la transición.
“Ellos han manifestado su interés en ser gestores de vida y salud, y dejar de ser EPS. Han hecho unos avances con el Ministerio, yo no he participado en esas reuniones, las ha hecho con el Ministerio porque sí están interesados en acelerar la transición”, afirmó Martínez en la emisora.
El funcionario agregó que Sura sería la primera EPS privada en hacer este cambio, pero que hay otras que también están evaluando la posibilidad. “Hay otras EPS que también han manifestado su interés, pero no han avanzado tanto como Sura”, indicó.
El presidente Petro y el ministro de Salud, Guillermo Alfonso Jaramillo, ya habían anunciado que una EPS privada estaba interesada en aplicar el nuevo modelo de atención, pero no habían revelado de cuál se trataba. Ahora, con la información de Blu Radio, se confirma que se trata de Sura.
Por su parte, la EPS Sura no se ha pronunciado oficialmente sobre el tema.
La reforma a la salud propuesta por el Gobierno ha generado un intenso debate en el país, pues implica una transformación radical del sistema actual, que ha sido criticado por su ineficiencia, corrupción y falta de calidad. El Gobierno defiende el nuevo modelo como una forma de garantizar el derecho a la salud de todos los colombianos, mientras que algunos sectores lo rechazan por considerarlo inviable, costoso y riesgoso.
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